Existen diferentes maneras de poder calentar una nave industrial con la oportunidad de no multiplicar los costes que ello suponen.
Los costes de la energía son extremadamente variables y, muy a nuestro pesar, influyen de forma determinante a la hora de calentar una nave industrial y en los costes de producción de las empresas y en el precio del producto final.
Por eso, es posible que contemplar la climatización de los espacios de trabajo no sea una prioridad para los responsables, pero, en ocasiones, resulta necesario.
Calentar sin sistema de climatización
La realidad es que las naves industriales no suelen incluir la climatización en sus fases constructivas a no ser se que se trate de almacenes destinados a la logística del frío donde se almacenen productos como alimentos. En estos casos, la forma de refrigerar espacios tan grandes suele ser a través del uso de amoníaco.
El funcionamiento de la refrigeración con amoniaco consiste en un compresor que comprime hasta la temperatura de condensación el gas seco, el refrigerante se condensa y el calor se disipa.
Calentar una nave industrial: todo lo que debes saber
Como expertos en consultoría inmobiliaria empresarial es excepcional ya que la propia actividad de la nave industrial requiere de una temperatura determinada.
Sin embargo, en la mayoría de naves industriales, hablamos de sistemas de climatización por un tema de confort de las personas que trabajan o visitan a diario las instalaciones. Si se quiere hacer un proyecto de climatización, por tanto, por un tema de confort, se puede optar por alguna de las siguientes opciones:
Opciones para calentar naves industriales
- Máquinas rooftop. Se trata de máquinas compactas que se instalan en las cubiertas y permiten una distribución homogénea del frío o del calor con un coste muy reducido y un proceso de instalación muy sencillo.
- Conductos que sirven como difusores de aire consistentes en unas mangas textiles que recorren todo el techo de la nave disipando el aire caliente o frío. Esta opción cuenta con grandes ventajas: se adaptan prácticamente a cualquier estructura, tienen una gran durabilidad, son económicos, fáciles de instalar, higiénicos y fáciles de limpiar. Además, son ligeros y estéticamente se pueden adaptar a las instalaciones. En cuanto a su funcionamiento, permiten una perfecta difusión del aire, no producen condensación y son resistentes a los rayos UV.
- Sistema HVLS. Ventiladores de gran tamaño que se suelen colocar en instalaciones como aeropuertos. Es un sistema más lento a la hora de climatizar un espacio pero es muy potente.
Estos sistemas permiten calentar una nave industrial en su totalidad pero también hay opciones para calentar o refrigerar, únicamente, aquellas zonas donde haya personas trabajando.
Solucionar para calentamiento de naves
Entre las opciones disponibles encontramos:
- Suelo radiante. Se puede colocar en espacios muy concretos y optimizar así los costes de instalación.
- Lámparas de infrarrojos.
- Free cooling o enfriamiento gratuito. Este sistema permite renovar el aire de una habitación tomando aire del exterior permitiendo así, además de ventilar espacios cerrados, equiparar la temperatura entre los diferentes ambientes y en diferentes momentos del día en función de su uso.
Existen multitud de opciones a la hora de climatizar una nave industrial, pero a la hora de escoger una plataforma para invertir o alquilar, es importante fijarse también en las características de su construcción.
El uso de materiales adecuados, aislantes, la orientación de las zonas de oficina, etc, serán claves para tener unas instalaciones con una temperatura ambiente agradable de forma natural y sin necesidad de recurrir a sistemas de climatización que, en una época de costes de la energía en alza, pueden suponer un verdadero quebradero de cabeza.